miércoles, 11 de marzo de 2015

1988: EL PODER DE UNO

RAIN MAN

Título original: Rain man

Año: 1988
País: EE.UU.
Duración: 128 min.
Fecha de estreno en España: 10 de marzo de 1989
Director: Barry Levinson
Guión: Barry Morrow y Ronal Bass
Música: Hans Zimmer
Montaje: Stu Linder
Fotografía: John Seale
Productor: Mark Johnson
Compañía: MGM/Grubert-Peters Co.
Intérpretes: Dustin Hoffman, Tom Cruise, Valeria Golino, Bonnie Hunt, Gerald R. Molen, Jack Murdock et al.

Ganadora de 4 Oscar: película, director, guión, actor principal


Charlie Babitt es un joven altivo y amante del dinero que posee un negocio de venta de coches de lujo. Sin embargo, este no le funciona demasiado bien, por lo que se ve abrumado por las deudas. Un día se entera de que su padre ha muerto y de que se ha convertido en el heredero de un descapotable y un jardín de rosas. Esto le extraña, pues su progenitor contaba con una fortuna de 3 millones de dólares, la cual ha pasado a manos de un beneficiario desconocido. Charlie decide averiguar la identidad de ese individuo, y sus indagaciones lo llevan a una residencia para disminuidos psíquicos de Cincinnati en la que se aloja Raymond, su hermano mayor, del que nunca tuvo noticias. Sin poder creer que los 3 millones vayan a parar a alguien que no sabe lo que es el dinero, Charlie decide secuestrar a Raymond, con la intención de devolverlo a cambio de la mitad de la fortuna paterna. Sin embargo, los planes no le salen como él planeaba, por lo que deberá convivir durante una semana con su hermano, lo que hará que ambos hombres se conozcan mejor.

Cuenta la historia que Barry Levinson tan solo contó con nueve semanas para la pre-producción de "Rain Man", pues la cinta, al tratarse de la principal apuesta de la MGM para los Óscars de ese año, debía ser estrenada durante la Navidad de 1987. Por eso, viendo el poco tiempo con el que contaba y el enorme potencial que tenía el guion para conmover al público, Levinson decidió no complicarse demasiado la vida y les pidió a los productores únicamente lo básico para hacer un largometraje de éxito: un par de estrellas en alza. El resto, puro trámite: un montador y un director de fotografía normalitos, un diseñador de vestuario decente y un desconocido compositor de origen alemán -un tal Hans Zimmer- para que escribiese la música. ¿El resultado? Un filme correcto, sin muchos alardes técnicos, pero con una historia conmovedora y unas interpretaciones memorables.

Y es que "Rain Man" es uno de esos largometrajes hechos única y exclusivamente para ganar premios. No en vano, obtuvo cuatro Oscars, entre ellos el de mejor actor principal para Dustin Hoffman, que en esta cinta no solo desarrolla el que es el mejor trabajo de toda su carrera sino que, además, crea escuela en algo que viene siendo muy habitual en el cine de los últimos veinte años: la interpretación de personajes "inadaptados". De hecho, es Hoffman el que da sentido al drama: sin él, "Rain Man" sería una película del tres al cuarto; gracias a él, "Rain Man" es un filme que merece la pena ver.

Por lo que respecta al resto del reparto, no hay mucho que destacar: un Tom Cruise en sus años mozos interpretándose a sí mismo -el papel de chulopiscinas empresario guaperas y arruinado está escrito para él- y una preciosa actriz de origen italiano llamada Valeria Godino cuyo único cometido es ponerle el necesario toque de ternura a la dramática historia del hombre de la lluvia.

Y es que, si hay una palabra que defina justamente a "Rain Man" esta es "ternura": si uno ve la película sin demasiada atención, simplemente dejándose llevar, no podrá evitar ser atrapado por la hermosa historia de amor fraternal entre Charlie y Raymond, dos personajes que, pese a sus enormes diferencias, en el fondo son iguales. En suma: "Rain Man" es una película de esas que podríamos catalogar como "de sábado por la tarde": tierna, emotiva, sin mucha floritura... Una cinta que va directa al corazón pero que, cinematográficamente, deja mucho que desear.

by Chuparrocas

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